De cero a íconos: Los logos de las marcas emblemáticas de nuestro país, su identidad visual y branding

Por: Janine Porras

identidad visual y branding

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Imagen: El extinto parque de diversiones “Reino Aventura”, ahora es “Six Flags México”.

Las personas que crecimos entre las décadas de los sesenta y la primera mitad de los noventa, cuando en México la televisión era nuestra fuente principal de información y entretenimiento, tenemos grabadas en la memoria muchas marcas de comercios, productos y servicios gracias no solo a los anuncios comerciales sino a sus logotipos e identidad de marca, que nos han rodeado y acompañado formando parte de lo que consumimos, de nuestros recuerdos, sensaciones y que muchas veces portamos con orgullo gracias a su presencia emotiva en nuestra experiencia de vida. ¿Quién no recuerda ir con la familia a desayunar a algún restaurante, hacer las compras en una cadena de tiendas de autoservicio o comprar productos específicos cuando comenzamos a vivir solos simplemente porque esas marcas se compraban en nuestra familia nuclear?

En 2015, el diseñador gráfico guanajuatense Gilberto Malagón Díaz, tuvo la idea de crear un museo digital que diera a conocer esos símbolos e identificadores gráficos hechos en nuestro país a lo largo de setenta años con la intención de documentar y mostrar ese aspecto de nuestra historia gráfica. Logos de México es un proyecto con presencia en línea en su sitio web y perfiles en las redes sociales Facebook e Instagram, que recopila, investiga cómo han cambiado las imágenes de las marcas desde la mitad del siglo veinte hasta nuestros días.

Clasificada en categorías, en la colección encontramos la identidad visual de productos, restaurantes y centros comerciales que son parte de nuestra memoria colectiva, como Sabritas, Burger Boy, Chocolates Turín, Sanborns, DeTodo, Gigante y Comercial Mexicana, sino también de instituciones y dependencias de gobierno como el Infonavit, IMSS, SEP, Conasupo e INEA; transportes y telecomunicaciones como el Sistema de Transporte Colectivo Metro de la Ciudad de México, la extinta Ruta 100, Imevisión, Imcine e IMER. Encontramos mascotas memorables como Pancho Pantera, Gansito Marinela, Aguigol, Pique o Carrazo –de Bardahl– o el Jarochito del refresco veracruzano que lleva el mismo nombre.

El logotipo es la cara de una marca, cambia para evidenciar las transformaciones de las empresas. Aeroméxico, por ejemplo, tomó un Caballero Águila como imagen y que ha evolucionado con el tiempo. El caballero continúa con cambios a través de las décadas. Sabritas, por su parte, pasó de la carita sonriente a fusionarse con los elementos de la imagen de Frito Lay, una de las empresas que compró Sabritas. El tierno gansito del pastelito de Marinela creado en 1965 ha continuado en la identidad hasta que la Ley General de Salud en materia de publicidad prohibió el uso de personajes en los empaques.

Los logotipos e identidad de marca han estado a mano de diseñadores, artistas y arquitectos mexicanos de distintas épocas como Vicente Rojo, Gabriel Martinez Meave, Luis Jaime Lara, Rafael Ramírez Lozano o Quique Ollervides; de extranjeros cuyo trabajo en México ha sido esencial en nuestra cultura visual como Joe Vera, John Nahmias Hanne y Lance Wyman; mujeres como Laura Medina Mora y Carmen Cordera, hasta destacados miembros de la Academia Mexicana de Diseño y profesionales de otras áreas del conocimiento, como Pedro Ramírez Vázquez, uno de los arquitectos más reconocidos de México quien combinó su labor arquitectónica con su gusto por el diseño, por lo que también desarrolló muchos proyectos destacados en el diseño de marcas como la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Cementos Apasco, Berel, Universidad La Salle y Televisa, cuyo logo representa la interpretación de Ramírez Vázquez del mundo visto por el ojo de la televisión.

Los logotipos han sido el elemento indispensable en el éxito de una marca, pues además de hacerla fácil de reconocer y recordar, la mayoría son creados estratégicamente para ayudar a mantener la coherencia en aspectos importantes de comunicación y percepción, como los valores, tono, posicionamiento, mensaje e historia. Un logotipo e identidad de marca puede influir fuertemente en las decisiones del consumidor al hacer juicios de valor, percibiendo un negocio, producto o servicio de manera particular lo que contribuye a mejorar o aumentar la confianza en la marca, familiarizándose con ella y aumentar también lo que en inglés es conocido como Customer Lifetime Value o CLV, que en palabras simples mide cuánto gastará en ese producto, servicio o empresa un cliente durante “toda su vida”.

En México, el diseño formal de identidad gráfica cobra importancia a partir de la época contemporánea, durante la década de 1940 en la que la transición de la economía mexicana se trasladó de una predominantemente agrícola a otra primordialmente industrial, promoviendo el crecimiento económico, la consolidación del mercado interno y la inserción de México en la economía mundial y que a su vez permitió la llegada a México de muchas marcas y productos provenientes principalmente de Estados Unidos y donde las primeras empresas transnacionales comprobarían la rentabilidad que les proporcionaba una imagen gráfica estructurada.

A pesar de la influencia del diseño estadounidense en esa época, caracterizado por un estilo más de ilustración, formación tipográfica y personajes de rasgos cómicos, visualmente, el diseño de marcas en México responde a la propia idiosincrasia nacional y a las diferencias en las preferencias estéticas propias de nuestra cultura y la adaptación a la estética predominante de cada momento histórico, por lo que podemos considerarlo como un ejercicio de reflexión e interpretación culturales.

En este artículo, hemos explorado cómo las marcas emblemáticas de nuestro país han forjado conexiones profundas con los consumidores a través de su identidad visual única. En este contexto, entendemos que cada empresa, desde las más establecidas hasta las más nuevas, aspira a crear una marca sólida y perdurable que resuene con su audiencia. En Master Research, comprendemos la importancia de este desafío y estamos comprometidos a ayudar a las empresas mexicanas a construir y consolidar su presencia de marca de manera estratégica y efectiva. Nuestra oferta de estudios de branding  integra las últimas tendencias globales para garantizar que las marcas mexicanas no solo destaquen, sino que también perduren en la mente de sus clientes. Permítanos ser su socio en el emocionante viaje de la construcción de marca.